Las filtraciones en techos de zinc suelen ser un dolor de cabeza en varias comunas, desde Providencia hasta La Florida. Con más de 30 años reparando techos y manteniendo hogares, sabemos lo importante que es solucionar estos problemas al tiro para evitar que el daño crezca y el gasto se vaya a las nubes.
Primero, ¿qué es un techo de zinc y por qué se daña?
En Santiago, las láminas galvanizadas son las más usadas por ser resistentes y económicas. Pero el sol fuerte, la lluvia y los cambios bruscos de temperatura –comunes en comunas como Maipú o La Reina–, pueden causar óxido, golpes y, claro, goteras. También la mala instalación y sellados débiles juegan su rol en estos daños.
Lo bueno es que arreglar estas filtraciones rápido evita humedad que daña la estructura, fomenta hongos y pone en riesgo las conexiones eléctricas. Además, en la temporada de primavera con lluvias intensas, un techo sellado mantiene tu casa más cálida y seca. Y si piensas en vender o arrendar en comunas como Ñuñoa, una reparación profesional sube el valor de tu casa.
¿Quieres hacerlo tú mismo? Aquí te dejamos una guía paso a paso para reparar el techo:
1. Después de una lluvia fuerte en Las Condes o Vitacura, inspecciona con linterna y escalera por óxido o fisuras.
2. Junta sellador DR840, masilla para metal, lija fina, pintura antioxidante, guantes y rodillo.
3. Limpia y desengrasa la zona, lija suavemente para sacar óxido.
4. Aplica masilla en las fisuras, deja secar 2 horas.
5. Cubre con sellador DR840 una capa uniforme y amplia.
6. Pinta con antioxidante para proteger.
Recuerda hacer esto en días sin lluvia ni viento, y si la falla es grande, mejor llama a un técnico certificado. En más de 300 reparaciones en la Región Metropolitana, nuestros métodos han reducido un 95% las filtraciones en el primer año. Un cliente de Ñuñoa nos cuenta: “Me solucionaron la gotera al tiro, ahora mi techo aguanta la lluvia sin problemas.”
Preguntas comunes que suelen hacernos:
– ¿Cuánto cuesta arreglar una gotera? Entre $25.000 y $60.000 CLP por m², según daño y materiales.
– ¿Puedo repararlo yo mismo? Sí, si es algo chico, pero para daños grandes mejor un profesional.
– ¿Cada cuánto revisar el techo? Idealmente cada 6 meses, antes y después del invierno.
– ¿Vale la pena la pintura antioxidante? Sí, protege y prolonga la vida del zinc.
– ¿Es seguro el sellador DR840? Sí, está certificado para el clima de Santiago.
En resumen, darle mantenimiento a tu techo de zinc a tiempo significa menos complicaciones, más seguridad y un hogar que aguanta lo que venga. Y si quieres olvidarte del problema ya, ¡llámanos al 226 837 000! Nuestros técnicos están al tiro para ayudarte en cualquier comuna de la Región Metropolitana.